Identificá el tipo de piel de tu rostro

El primer paso para cuidar tu rostro es identificar que tipo de piel tenes, de esa manera vas a poder elegir productos o tratamientos específicos que te ayuden a cuidarla.


Tipos de piel

Seca

La piel luce apagada, envejecida, opaca y sin brillo, con tendencia a resecarse. Sensación tensa, áspera o escamosa.

Las pieles secas tienen menos humedad y producen menos sebo que otros tipos de pieles, esto provoca la resecación y aparición de líneas de expresión. 


Recomendaciones para cuidar este tipo de piel:

- Usar limpiadores faciales suaves y poco abrasivos.

- Usar un exfoliante suave una vez a la semana para eliminar células muertas.

- Aplicar mascarillas suaves una vez a la semana que aporten nutrientes a la piel, como las mascarillas de arcillas.

- Aplicar tónicos faciales como el agua de rosas.

- Usar aceites faciales o bálsamos / cremas faciales humectantes y nutritivas que tengan gran cantidad de aceites en su formulación y tengan efecto regenerativo. Aplicarlos siempre después de la limpieza facial.



Oleosa / grasa

Este tipo de piel tiende a producir más sebo del necesario, presenta un brillo abundante, con poros dilatados y con tendencia a puntos negros. 

Suelen tener sensación oleosa durante todo el día, brotarse con facilidad y tienen tendencia a la aparición de impurezas.


Recomendaciones para cuidar este tipo de piel:

- Usar limpiadores faciales antibacterianos, podes usar cepillos o discos de limpieza facial para ayudarte.

- Usar un exfoliante y/o mascarillas faciales entre 1 y 3 veces a la semana.

- Aplicar tónicos faciales luego de la limpieza como el agua de rosas o de azahar.

- Usar cremas o geles hidratantes faciales que tengan un gran porcentaje acuoso en su formulación.

- No usar demasiados productos y no limpiar el rostro con demasiada frecuencia: la limpieza dos veces al día es mas que suficiente, una por la mañana y otra por la noche.

- Elegí cremas o aceites faciales de jojoba, es el mas "parecido" al sebo natural de nuestra piel que producen las glándulas sebáceas, que funciona como un indicador para minimizar su producción. 

- Usar desmaquillantes que no tengan muchos aceites en su fórmula.



Equilibrada

Las pieles equilibradas (también llamadas "normales") lucen hidratadas, suaves y sin oleosidad visible.

Suelen estar en estado de equilibrio, no es demasiado seca ni muy grasa. Tiene poco acné, poros o manchas y no se reseca demasiado.

Es de las mas fáciles para cuidar y tratar, ya que la mayoría de los productos para el cuidado del rostro son adecuados para este tipo de piel.


Recomendaciones para cuidar este tipo de piel:

- Hacer la limpieza facial todos los días, dos veces al día, una por la mañana y otra por la noche.

- Usar mascarillas o exfoliantes faciales 1 o 2 veces por semana.

- Siempre usar cremas faciales hidratantes después de la limpieza o exfoliación facial.

- Aplicá tratamientos específicos para cuidar alguna zona del rostro que lo requiera, en caso de ser necesario, por ejemplo, el contorno de los ojos.



Mixta

Este tipo de pieles son una combinación de dos tipos de pieles: equilibrada-seca y grasa-oleosa o con impurezas.

El sebo se suele acumular en la zona T (frente, nariz y mentón) y tiende a desarrollar impurezas.

Presenta aspecto brillante y sensación oleosa en la "zona T", y la zona de las mejillas suele ser entre normal y seca.


Recomendaciones para cuidar este tipo de piel:

- Hacer la limpieza facial todos los días, dos veces al día, una por la mañana y otra por la noche con limpiadores faciales antibacterianos y suaves.

- Usar un exfoliante y/o mascarillas faciales entre 1 y 3 veces a la semana.

- Aplicar tónicos faciales luego de la limpieza como el agua de rosas o de azahar para ayudar a equilibrar la piel.

- Usar cremas o geles hidratantes faciales que tengan un gran porcentaje acuoso en su formulación.

- Elegí cremas o aceites faciales de jojoba, es el mas "parecido" al sebo natural de nuestra piel que producen las glándulas sebáceas.

- No uses productos muy abrasivos en la zona más seca. Podés combinar distintos productos para las zonas del rostro, por ejemplo, con las mascarillas faciales podes aplicar una para cada zona de la piel.



Sensible

Se caracteriza por estar roja e irritada, y es susceptible a factores externos como el aire, sol, calor, etc.

Presenta síntomas de tirantez y picor, se irrita con mucha facilidad y suele enrojecerse tras usar determinados productos que no tienen ingredientes suaves.

Si bien este tipo de piel suele presentar poros más pequeños y ser más seca, también podés tener piel sensible junto con otro tipo de piel (mixta o equilibrada).


Recomendaciones para cuidar este tipo de piel:

- Usar limpiadores faciales suaves y poco abrasivos.

- Aplicar tónicos faciales como el agua de rosas o de azahar, estos son muy buenos para las pieles sensibles, alivian enrojecimientos, irritación e inflamación de la piel.

- Usar cremas o geles hidratantes faciales que tengan un gran porcentaje acuoso en su formulación, que tengan filtro solar y acción relajante.

- No uses productos con alcohol o fragancias fuertes ya que estos pueden irritar la piel.



Cada piel es un mundo, lo que le puede funcionar a una persona quizás a otra no.


Recordatorio: la cosmética no es mágica, el secreto está en la constancia.


Recomendaciones generales para lucir una piel saludable, sin importar el tipo de piel que tengas:


- Ser constante con los tratamientos que hacemos y tener paciencia para ver grandes resultados.

- Tener una rutina de cuidado facial diaria, tanto de día como de noche y con tratamientos específicos.

- Seguir las instrucciones de aplicación de los productos.

- Tomar mucha agua y llevar una buena alimentación.

- Elegir tratamientos o cosméticos naturales.

- Usar siempre protección solar.

- Ante la duda, irritaciones o alergia de algún producto, consultar con un especialista.


Espero que este post te ayude a identificar cual es el tipo de piel de tu rostro y cómo podés cuidarla.


Agustina🌸

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